jueves, agosto 11, 2011

autobiografía 7

Me soliviantan los pedantes
chacales de frases redondas
cerriles de mente difusa
que se arrojan turbiamente
a beber de los urinarios progres
deseosos de rellenar con eslóganes
los vacíos insondables del corazón.

Pena, sí. Piedad, sí. Conmiseración, sí.
Pero al imbécil que habita en mi cuarto
le sale la vena jacobea
la furia del segundo de mayo
cuando contempla embobado
lo bien que aprenden los  coyotes
el fiero arte de los lobos:
hablar para no decir
ensalzando con palabras lo que se desprecia con los actos
mientras nos ceñimos de superman la capa.
y salvamos a la humanidad con nuestros gritos.
Ignorantes, estupidos, botarates.
Prestos de palabras y tardos de oídos
que preconais con palabras melindrosas
las mentiras que vuestros hechos proclaman a mansalva.
Fieras, bestias, holgazanes
masa inerte, pueblo servil
que tan pronto quemais  brujas como  iglesias.
acostumbrados unos a gritar
otros a no escuchar.
Camaleones de lo mediocre
que vivís sin pensar
sabed que aquí
uno de los vuestros os lo anuncia:
todo lo mudará la edad ligera
y cada uno
solo
sin sombras de masas que nos oculten
daremos, al fin, cuenta de nuestro actos.

1 comentarios:

Hebert - paginas web dijo...

Que gran lexico tienes para escribir jeje